En muchas industrias, la capacidad de garantizar automáticamente la calidad y prevenir y detectar incendios es extremadamente importante. La solución ideal es una cámara de infrarrojos instalada de forma permanente que utilice tecnología de medición de infrarrojos para supervisar sus procesos o su planta las 24 horas del día, los 7 días de la semana y los 365 días del año, y que detecte automáticamente las más mínimas diferencias de temperatura. Este método de medición por infrarrojos ya se utiliza en una gran variedad de aplicaciones de automatización industrial en todo el mundo.

Las cámaras termográficas permiten soluciones de sistemas de medición y termografía rentables y totalmente integrados para una amplia gama de aplicaciones, como el desarrollo y la optimización de procesos, la supervisión de procesos industriales, las pruebas de productos, la garantía de calidad, las aplicaciones de seguridad y la protección contra incendios.

Una cámara termográfica puede detectar diferencias de temperatura mínimas incluso en las condiciones de funcionamiento más adversas, como la presencia de humo, niebla o vapor en el entorno de medición. Ejemplos:

Control del proceso mediante tecnología de medición por infrarrojos